El Secuestro Del Fútbol

El declive se había consumado, y tras la celebración de las elecciones, Santiago Gallego asumió la presidencia y el difícil reto de reformar un club venido a menos y con problemas acuciantes. El Valladolid de aquella campaña se mostró como un equipo sin tapujos, que desarrollaba un fútbol espectacular pero con problemas de marcaje y portería, y se consiguió mantener la categoría. “Algunas marcas promueven su imagen sostenible afirmando que utilizan plástico oceánico o redes de pesca recicladas en sus productos; por ejemplo, Patagonia y Adidas anuncian su uso de plásticos oceánicos como una alternativa mejor -o un ‘sustituto ecoinnovador’- del plástico virgen, y varias empresas comercializan nylon regenerado hecho de redes de pesca y otros residuos.

Según informa El País, las grandes empresas españolas de la confección, Inditex y Mango, sostienen que solo trabajan con plazos y volúmenes razonables, y que está «tajantemente prohibido» que sus proveedores subcontraten sin permiso. Aquel año, el Real Valladolid se quedó a las puertas del ascenso, y para la siguiente temporada se contrató a Perico Torres, que falleció de manera repentina y provocó una fuerte inestabilidad en el banquillo pucelano que acentuó la crisis de la institución.

En el partido de presentación, disputado el 22 de septiembre de ese año en el estadio de la Sociedad Taurina, junto a la Plaza de Toros, el primer once del Real Valladolid, formado por Arana, Pombo, Martín, Orúe, Sarralde, Echevarría, Montalbán, Perico San Miguel, Sainz, Sierra y Pablo López, venció por 2-1 al Deportivo Alavés de Vitoria. Además, Teka desaparece. Durante una parte de la temporada, sin embargo, el Madrid lució de blanco absoluto y sin publicidad, como homenaje a las primeras camisetas en el año del centenario. A pesar de que el Real Valladolid mantuvo una trayectoria muy irregular durante aquella campaña, consiguió el ascenso en un emocionante sprint final que le llevó a la segunda posición de la tabla en detrimento de Osasuna.

El Real Valladolid concluyó la campaña en sexta posición, y los aprietos económicos le obligaron a vender a la mayor parte de sus estrellas. El Real Valladolid se mostró como un conjunto sólido que se proclamó campeón de su grupo y certificó su vuelta a la máxima categoría del fútbol español.

En su debut en ella la siguiente temporada, el conjunto vallisoletano realizó una gran campaña, camisetas futbol thai terminando segundo dentro de su grupo y último en la fase final por el ascenso. El equipo debutó en el Grupo B de la Segunda División -equivalente a una Tercera División- del Campeonato de Liga que se puso en marcha aquella misma temporada. El Real Valladolid consiguió el objetivo de la permanencia con mayor tranquilidad de la esperada, y realizó una gira por América Central gracias al gran seguimiento mediático sobre Gilberto desde Honduras, camisetasdefutbolbaratas com su país natal.

No hubo más remedio que tirar de la cantera y reconvertir el Europa Delicias en el Real Valladolid Promesas, del que despuntaban talentos como Julio Cardeñosa, que pronto pasó al primer equipo. Los resultados que siguieron, un empate y una derrota, impidieron el avance a la ronda final de las eliminatorias que se disputó en Cali entre el 10 y 17 de julio.

La directiva presidida por Carlos del Río Herrero confió en José Luis Saso como entrenador y en una mezcla de jóvenes talentos, entre los que destacó Emilio Morollón, y de jugadores experimentados, como Coque, que regresaba a casa tras su frustrado paso por el Atlético de Madrid. Unicef, como había prometido la directiva barcelonista, no desaparecerá de la zamarra del equipo, pero tampoco compartirá espacio con Qatar Foundation.